Y las inyecciones las pone quien?
Ya habian transcurrido 3 dias sin tomar anticonseptivos y tal como dijo el Dr. llego mi periodo, lo que marcaba el inicio del tratamiento hormonal. Ya tenia en mi poder todos los medicamentos necesarios y me encontraba comodamente sentada en mi casa para comenzar con el.
Durante la entrevista con la Matrona, ella me explico el procedimiento para aplicarme el Puregon a traves de una lapicera que permite regular la dosis exacta indicada por el medico. Lo que nunca pense hasta ese momento era que debia inyectarme yo misma todos los dias, tal cual lo hace un diabetico. Pero habia mas, una segunda inyeccion (HMG) que era intramuscular y debia ser aplicada en algun servicio medico o prefesional del area.
Ahi comence a coordinar todo desde mi hogar, yo pude inyectarme tranquilamente el Puregon, pero necesitaba ayuda con el HMG, pues mi valiente marido no era capaz de pincharme.
Conseguimos ayuda con una persona del Departamento de Salud, quien me inyecto durante los 4 dias que debia utilizar el HMG. A modo de anegdota, la Sra era un poco nerviosa y un dia paso a botar la ampolla con el suero fisiologico de la inyeccion antes de prepararla y se puso histerica, tanto asi que su nerviosismo me lo traspaso y al momento del pinchazo senti mucho dolor.
Volviendo al Puregon, que debo confesar que me sudaban las manos mientras preparaba la dosis en la lapicera y solo esperaba que no me doliera, ya que debia inyectarme todos los dias. Al final solo cerre los ojos y lo hice.
La lapicera posee una aguja muy fina que practicamente no se siente, solo queda un pequeño ardor al interior de la piel que pasa al cabo de algunos minutos, pero nada doloroso.
Esa fue mi rutina durante los primeros cuantro dias, donde mis gluteos ya no soportaban la mano de la enfermera y mi guatita mostraba signos de pequeños agujeros. El quinto dia, nuevamente viajo a realizarme una ecografia para que el Dr. midiera el crecimiento de mis foliculos y en base a eso, pudiera recalcular la dosis necesaria para ayudarlos a crecer. La ecografia mostro un crecimiento levemente inferior a lo esperado, por lo que desde ese dia me aumento la dosis de Puregon.
Al sexto dia debi comentar a inyectarme Orgalutran, que se supone inhibe las hormonas que provocan la salida del ovulo del foliculo, pues nuestra intencion es que crezcan y maduren hasta el punto ideal para ser extraidos.
Algo que me tranquiliza, es que despues de leer todas las etiquetas de los medicamentos y sus efectos secuntadios, no he vivido ninguno de ellos, solo una leve sensacion de nauceas que pasa a los pocos minutos, por lo que seguimos en pie para la siguente ecografia que nos indicara cuanto mas han crecido los foliculos y marcara el dia que debo hacer maletas para un nuevo viaje, esta vez regresare a casa despues del procedimiento de extraccion.



























